Oración del día
18 de junio de 2025
Señor Jesús:
Deseo comenzar este día dialogando contigo para que me guíes y bendigas cuanto haga. Reconozco que eres mi salvador y abogado ante el Padre eterno.
Tú, Hijo de Dios, recurrías a cada momento al Padre para
sostenerte en pie sin vacilar. Aquella noche, víspera de la crucifixión, oraste
más de una hora pidiendo al Padre que apartara de tu presencia ese cáliz, el
cáliz de la angustia y del dolor, el cáliz de la soledad y la traición. Tú nos
enseñaste que la oración es fuente de vida, en la oración halla, quien recurre
a ella, la esperanza y la paz para su alma. Fue en la oración de Los Olivos que
dijiste Padre, “más no se haga mi voluntad sino la tuya” y te entregaste en
manos de los pecadores para que tuviéramos vida eterna. (Juan 5:13).
Hoy deseo pedirte, que, si es tu voluntad, apartes de mí
las preocupaciones de la vida, los vacíos y desencantos que siento en mi trato
con algunas personas, las malas inclinaciones que producen vértigo, los pensamientos
que causan malos deseos, la soledad que acompaña en la calle atiborrada de
gentes. Por favor, Señor, dame sabiduría y fuerza para hacerlo todo para gloria
tuya. Amén.

Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por su comentario