AMIGOS DE LA LECTURA

  31 de enero de 2024 Señor y Dios nuestro:   Queremos darte gracias por esta maravillosa oportunidad que nos ofreces al regalarnos un nuevo día. Tú ves mejor que nadie lo que hacemos y sabes hasta nuestros pensamientos más ocultos. Nada de lo que realizamos es para ti una sorpresa porque siempre estás atento y observas nuestras obras.   Leamos el Evangelio: Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan? (Mateo 7:11) ¿Te ha sucedido que después de haber orado fervientemente por algo, Dios haya respondido de una manera diferente a lo que esperabas? A veces, Dios nos responde con el silencio y no comprendemos esa forma de respuesta. Una de las cosas que he aprendido a través de mi caminar con Cristo: ¡Es que Él siempre desea lo mejor para sus hijos! Es un buen Padre ¡Somos sus hijos! ¡No te enojes con Dios, confía en Él! Él conoce exactamente lo que necesitas y te

  30 de enero de 2024   Señor: A ti venimos, en este despuntar de la aurora, mi Señor y mi Dios, a contemplar tus obras admirables. Te presentamos el gozo de nuestros corazones al sentirnos llenos de tu vida. Danos sabiduría para comprender que Tú, mi Dios, estás en control de toda la creación. Tú permites que los hechos, aparentemente buenos o malos, obren para bien de los que te aman y son llamados conforme a tu voluntad. (Romanos 8:28). Gracias, Padre, porque escuchas el clamor de nuestras oraciones. Gracias porque comprendes nuestra condición humana y tienes paciencia con nosotros que somos pecadores. Te agradezco que contestes nuestras súplicas. Que tu Santo Espíritu obre en nosotros y transforme nuestras vidas y familias. Te pedimos sabiduría para escoger lo que más nos convenga y sigamos el camino de la santidad. ¡Que tu nombre sea glorificado en cuanto hagamos en este nuevo día! Acepta, también, nuestras miserias, derrotas, esfuerzos y necesidades. Somos tus hijos y a

  29 de enero de 2024 Padre celestial: En nombre de Jesús, tu Hijo, imploro tu bendición para todo cuanto haga en este nuevo día. Te ofrezco mis proyectos y anhelos, así como mi vida. Te reconozco como mi Dios y Padre y abro mi corazón para que Jesucristo more en él. Que allanes el camino que tome y tu Santo Espíritu lo ilumine. Bendice a todos aquellos que se unan en oración para glorificarte. Ten misericordia de todos los enfermos. Tú, que eres la vida, devuélveles la salud y permite que sean felices contemplando las maravillas que creaste. Que en sus casas y familias hoy se sienta tu presencia al verlos regresar sanos y sonriendo. Que en el transcurso de este día y la semana dé testimonio de tu amor amando a todos aquellos a mí se acerquen. Despierta en mí el sentimiento de la gratitud y que mis actos sean una invitación a seguirte. Que todos sepan que yo creo en ti y que de ti todo lo espero. Señor, aumenta mi fe y no olvides que es tu fuerza la que me impulsa a salir radiant

  28 de enero de 2024 Señor:   Gracias por este hermoso día. Acudo a ti porque eres mi Padre y mi Dios. Reconozco tu presencia en mi vida y no deseo apartarme de ti. Ilumina las sendas que deba tomar y bendice a quienes encuentre a mi paso. Señor, gracias por todo lo que haces por mí. Sin ti mi vida no tiene sentido. Tú eres el timón de mi barco y me llevas por los mares de la felicidad, porque Tú inundas mi corazón con Tu amor. En Ti encuentro la bondad y la misericordia. Tú me enseñas a ser mejor persona y a comprender a los demás y sus diferencias; todo lo que permites en mi vida es para bienestar personal, familiar y comunitario. Tú cuidas de tu pueblo como Padre amoroso. Inclina tu oído y escucha mi oración. Tú nos dijiste que habitarías en los corazones rectos y sinceros. Dame, Señor, un corazón recto y sincero.      Señor, tú me llamaste a la existencia y deseas que sea feliz. Ayúdame a vencer los obstáculos que impiden que sea feliz. Te lo pido en el nombre poderoso

  27 de enero de 2024   Padre: Gracias por la brisa que refresca la mañana. Te suplico que en este nuevo día me acompañes y me inspires la obediencia que te agrada. Dos mundos existen. Este material en el cual confiamos demasiado sin darnos cuenta de que en él todo es pasajero. Su belleza nos deslumbra y confunde. Este mundo donde habito, además, presenta muchas confrontaciones entre individuos y pueblos. Muchos deseamos fraternizar, vivir en paz, pero hay también los que aman la violencia e insisten en la guerra, en intimidar al hermano con armas en la mano para someterlo y arrebatarle lo que posee. En esta tierra migrantes y desplazados huyen para salvar sus vidas. Otros, sumidos en la miseria, no pueden ir a buscar el pan porque este mundo es ajeno para ellos y mendigan o buscan comida en los basureros. Tu Hijo nos habló de un mundo donde el amor es causa de felicidad eterna. En esos parajes están los ángeles y los que aprendieron a amar a sus semejantes y mediante el servic

  26 de enero de 2024 Padre nuestro: Alabado seas en la obra maravillosa que creaste. Perdona nuestra falta de fe. Perdona que no busquemos alejarnos de los vicios y pecados que nos oprimen: “Adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones , herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas”. (Gálatas 5:19-21). La enumeración podría continuar, pero detengámonos en los celos y en la ira. El verdadero amor de pareja, fundado en la confianza y el respeto, no da existencia a los celos. Si la pareja invoca a Dios y Él es el eje de la familia los proyectos familiares tendrán éxito. Cuando las personas son inseguras desconfían de su pareja y esa desconfianza crea fantasmas donde no debiera haberlos. En la persona que ama su corazón desea lo mejor a su pareja y si es necesario se sacrifica para para ver feliz al que ama. La Ira, si nos dejamos llevar por ella, terminará lanzándono

  25 de enero de 2024   Padre nuestro: Te alabamos y bendecimos en este nuevo día. Incierto es el futuro para el ser humano. Aunque muchas instituciones del orden nacional e internacional hagan previsiones y cálculos según las estadísticas ninguno puede asegurar que el día de mañana nos pertenece. Muchos se ufanan porque de acuerdo con su prospectiva económica todo irá de maravilla. Pero la ciencia y la tecnología humanas no pueden prever otros factores que son imprevistos como terremotos, revoluciones, guerras, Tsunamis, sequías, accidentes, etc. De repente la muerte sale a nuestro paso cuando no la esperábamos. Así Dios manifiesta que es el dueño de la vida y que nosotros como dice Job somos simples gusanos. (Job 25:6). En nuestra comodidad y soberbia no queremos admitirlo. Así el día de hoy sea aciago decimos mañana será excelente y todo irá mejorando con el paso del tiempo. Dios derriba la vanidad y la soberbia humanas. “El convierte los ríos en desierto, y los manantiales de

  24 de enero de 2024 Padre nuestro: En este hermoso día invoquemos a Dios para alabarlo. ¿Cómo anda tu relación con Dios? ¿Andas un poco alejado de él, descarrilado de los caminos de Dios? Nuestra desobediencia a Dios deja heridas: la culpa es una de ellas. Pero confiar en Jesús cura nuestras heridas y nos da la oportunidad de un nuevo comienzo. En el libro Deuteronomio 4:7 leemos: "En verdad, ¿qué nación hay tan grande, cuyos dioses se acerquen a ella como lo hace para nosotros, siempre que lo invocamos, Yavé, nuestro Dios?" A lo largo del antiguo testamento en la historia de la salvación Dios se manifiesta para guiar a su pueblo. Pero muchas veces es el pueblo el que se rebela y no hace su voluntad. En el primer libro de Samuel (capítulo 7) piden al profeta un rey para que no sea Dios quien los dirija. En otros pasajes lo abandonan para ir a otros dioses. Pero en el nuevo testamento Jesús se ofrece como sacrificio expiatorio por el pecado de todos para llevarnos a

  23 de enero de 2024 Padre nuestro: En este nuevo día te alabo y bendigo. Gracias por concederme esta oportunidad de servirte. No necesito agacharme para leer la advertencia que aparece escrita en el paquete de cigarrillos tirado en la calle: «El tabaco es nocivo para la salud». Esto indica que si fumo puedo morir pronto a causa de una de las enfermedades que produce el consumo de tabaco. Lo mismo puede decirse de la droga o el alcohol.   Lo que llama la atención es que dicha inscripción no impidió a quien tuvo ese paquete en sus manos fumarse todos los cigarrillos. Tal vez piense que esta advertencia es exagerada, o que sólo se dirige a los demás, a los que fuman «demasiado». Igualmente hay muchas personas que dudan de las advertencias que Dios hace por medio de la Palabra de su Hijo amado. Sin embargo, Dios deja bien claro lo que sucederá a cada ser humano: "El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios es

  22 de enero de 2024 Padre nuestro:   Gracias por la vida propia y la de aquellos que amo. Gracia por enseñarme que la verdad preserva de la hipocresía y que las máscaras no logran ocultar para siempre la maldad. Gracias por la fe que me permite ir hacia ti con la seguridad de que me escuchas. Gracias, Señor Jesús, por tu cruz que me enseña a soportar las sombras que me persiguen y fustigan. Gracias por el perdón que sana mi alma y mi cuerpo. Gracias por la fragilidad con que me creaste porque esa realidad me invita a ser comprensivo con el débil. Gracias por tu palabra que me consuela y orienta en los días aciagos. Gracias por los padres que me diste y los testimonios de vida que me dieron porque ahora soy una persona que reconozco mis errores y deseo corregirlos. Gracias por los dones y talentos que me diste para trabajar en la construcción de tu reino de amor y paz. Gracias, Señor, porque a pesar de tantos caminos confusos y peligrosos tu Santo Espíritu me da luz para que vea e

  21 de enero de 2024 Señor Jesús: Gracias por darnos este nuevo amanecer. Tú nos enseñas a estar tranquilos en medio de las dificultades. A caminar sin temores en medio de las preocupaciones. Nos indicas el camino al Padre y nos adviertes de las consecuencias de no seguir su voluntad. Si a ti acudimos con fe respondes a nuestras plegarias. Tú, Señor, nos recuerdas que la vida es breve y que debemos amarnos unos a otros para construir el reino de amor que nos pides antes de recibir la vida eterna. Somos gotas de agua en la inmensidad de este universo y solo con tu gracia seremos capaces de trascender mediante el amor. Pero tu gran lección, Señor Jesús, es el perdón. Que debemos perdonar la ofensa recibida y olvidarla. Sólo si perdonamos seremos perdonados. Hoy debemos esforzarnos en perdonar, en escuchar y en compartir. Señor, danos la fuerza de tu Santo Espíritu para que podamos soportar las tentaciones y ser leales a tus mandamientos. "No nos tengas rencor por faltas de nu

  20 de enero de 2024 Señor Jesús: Gracias porque el poder de tu Santo Espíritu inunda mi alma en este nuevo día. Creo en ti. En tus manos deposito mi confianza y en tu amor mis problemas y preocupaciones. Borra las dudas de mi corazón y ayúdame a caminar con la certeza de que estás conmigo y que me ayudarás a vencer los obstáculos que me presente el día. Gracias, Señor, porque me ayudas a seguir adelante con la seguridad de que tu gracia ilumina mi camino. Gracias por la fortaleza que me concedes ante los sucesos dolorosos que el quehacer diario me presenta. Tú me das la fuerza para luchar y vencer. Anhelo que tú seas glorificado a través de mí y de mis actitudes frente a retos que tengo que afrontar. En tu palabra medito y Tú me recuerdas: En mi angustia invoqué al Señor, y él me respondió. (Salmo 120:1) Gracias, Señor, porque estás conmigo y me sostienes en todo momento. Gracias porque no temo. Estoy seguro porque siento tu presencia y en los desafíos Tú me ayudas. Graci

  19 de enero de 2024   Señor Jesús:   Gracias por este nuevo día. Tú eres la palabra del Padre. En ti se halla la verdad porque Tú eres la Verdad. A ti venimos a implorarte sana nuestros corazones. Cuida nuestros cuerpos. Bendice nuestros hogares y lugares de trabajo. “Den gracias al Señor por su amor, ¡por lo que hace en favor de los hombres! Pues el apaga la sed del sediento y da abundante comida al hambriento.” Salmo 107: 8-9) Concédenos en este día seguir tu ejemplo y buscar la voluntad de Dios. Enséñanos el lenguaje del silencio para poder hablar sin presunciones. Haz que nuestra lengua al hablar sea como la de los niños para que sean escuchadas nuestras alabanzas y súplicas. Intercede por nosotros ante tu Padre amantísimo para que nos guarde de todo mal y seamos uno contigo y con el Espíritu Santo. Amén  

  18 de enero de 2024 Señor: Tú llenas mi corazón de alegría con la luz de este nuevo día. Tú conduces a tu pueblo si te acepta y cambia su actitud. Tú guiabas a los israelitas por el desierto de manera sobrenatural. Una nube les indicaba cuándo tenían que levantar el campamento y cuándo debían detenerse. (Números 9:17). Así los conducías con bondad a través de un mundo hostil, y al mismo tiempo ponías a prueba su fe y obediencia. Ahora, el Señor Jesús dirige a los creyentes de manera diferente. Más que signos externos, nos da una convicción interior, pues desea hacernos partícipes de sus pensamientos. Jesús no nos llama “siervos, sino amigos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor" (Juan 15:15). Un siervo debía actuar según las órdenes de su amo, mientras un amigo comparte los pensamientos de aquel a quien está ligado por la amistad. Por lo tanto, es preciso conocer el pensamiento del Señor. Consultemos su palabra y llevemos a la práctica lo que ordena: “Transformaos

  17 de enero de 2024   Señor y Padre Nuestro:  T e alabo en este nuevo día porque eres el único refugio de los pecadores. Admito que mis equivocaciones me llenan de tristeza. Déjame ser como un niño para que reconozca tu misericordia en el perdón de mis faltas y sea obediente hasta el día en que me llames. Sé que sin obediencia no podré ser como un niño y así tener seguro mi descanso en tu reino. Por obediencia el Rey de los Cielos, tu Hijo, aceptó nacer en un establo y hecho hombre, por obediencia, tomó el camino de la cruz hasta morir. Hazme obediente para aceptar mi cruz y sentir su yugo suave que me conduce hacia ti. Concédeme ser obediente para acatar tu voluntad y cumplir el mandamiento de amor que tu Hijo nos legó con su ejemplo. En este día, que generosamente me regalas, que por obediencia a ti acepte mi trabajo no como un castigo sino como una bendición. Que por obediencia vea oportunidades y no un cúmulo de dificultades en mi labor. “Mirad, pues, con diligencia cóm

  16 de enero de 2024   Amado Dios: Gracias te damos por este nuevo día y nuestra vida. Perdona que hemos olvidado tus preceptos y hemos buscado el camino del mundo. Hoy en día la pureza moral, para muchos, no tiene sentido. La gente piensa que la persona que clama a Dios vive dentro de la hipocresía. ¡Es tan fácil hacer teatro! Tal vez tangan razón porque predicamos y no actuamos de acuerdo con lo que pensamos y decimos. Con respecto a esto, Jesús habló duramente contra el partido religioso de los fariseos, quienes hacían gran énfasis en una pureza exterior, legalista: "Limpiáis lo de fuera del vaso y del plato, pero por dentro estáis llenos de robo y de injusticia" (Mateo 23:25). La pureza que reclamas, Señor y Dios nuestro es la del corazón, la de las intenciones, las motivaciones sin ambigüedades. Entonces, ¿Cómo purificarnos interiormente? No podemos hacerlo por nosotros mismos, pero Tú, mi Dios, sí. Sólo nos pides que aceptemos al Señor Jesús como nuestro Salvador

  15 de enero de 2024 Señor:   Te alabo y bendigo en este nuevo día. Hoy deseo meditar en el poder de tu palabra: Dice el salmista: “Para siempre, oh, Señor, permanece tu palabra en los cielos”. (Salmo 119:89) Yo creo en tu palabra y deseo acatar tu mensaje, pero me faltan fuerzas. Señor Jesús, Tú eres el Verbo de Dios. “El cielo y la tierra pasarán, pero tus palabras no pasarán”. (Mateo 24.35) Acepta, Señor, mi fe vacilante. No dejes que me vuelva atrás cuando los demás me critiquen por creer en ti. Guíame y aliméntame con tu Palabra. Tu palabra tiene poder para realzar el milagro, la maravilla de sanar al enfermo, el gozo de consolar al triste, la alegría de ser luz para el camino y lo más sublime: tiene el poder de perdonar. Tu palabra, Señor, es tan antigua como el origen del hombre y aunque muchos la hayan atacado o prohibido bajo pena de muerte, no ha dejado de iluminar el sendero de quien cree en ti. Adora al Señor tu Dios, y él bendecirá tu pan y tu agua. Yo apartaré

  14 de enero de 2024   Amado Dios: Hoy como todos los días, antes de ver la luz del sol, me encuentro frente a Ti para alabarte y darte gracias por las cosas maravillosas que haces en mi vida y para poner en tus manos cuanto haga y anhele. Tú, oh Creador, eres mi refugio en tiempos de oscuridad, eres la antorcha que ilumina el camino; en estos momentos de sed espiritual que debilita mi espíritu te suplico que vengas y renueves, cual lluvia refrescante, mi vida. Hoy digo como el salmista: "El Señor es mi pastor: nada me falta; en verdes pastos él me hace reposar. A las aguas de descanso me conduce, y reconforta mi alma. Por el camino del bueno me dirige, por amor de su nombre." (Salmos, 23 :1-3) Gracias, Señor, por la familia que me diste y me ama. Te doy gracias por cada día que he vivido y porque pude sentir que en todos los instantes de mi vida Tú estabas conmigo susurrándome palabras de sabiduría y guiando mis pasos por el camino más seguro y conveniente. &quo

  13 de enero de 2024   Padre Celestial:   Te bendigo, Señor y Padre, con la sinceridad de mi corazón. La alabanza que brota de mis labios es pura y humilde. Que el cielo y la tierra te alaben. Que todo mi ser sienta tu gozo y te dé gracias. Admito mi pequeñez y exalto tu grandeza y poder. Te alabo, Señor Jesús, porque siempre estás ahí dispuesto a dar paz y consuelo a mi alma. Te alabo porque iluminas mi vida con la luz de tu Santo Espíritu y me llevas por caminos rectos hacia la vida eterna. Te suplico que mi angustia y mi duda se conviertan en fuerza y luz de amor. No dejes que en mi corazón broten el odio o la venganza. Te alabo y te doy gracias porque Tú, mi Señor, tienes en tus manos mi vida y es mi deseo someterme a tu santa voluntad. Que mis acciones hoy estén de acuerdo con tus preceptos. Gracias por este día que me invita a glorificarte y porque escucho en la serenidad del amanecer tu voz que bendice todas mis acciones. Amén.

  12 de enero de 2024   Padre Celestial:   Gracias por estos momentos de vida que me das para reflexionar y alabarte.   Hoy deseo que me instruyas.   La susceptibilidad es una fuente de sufrimiento muy presente en el fondo de cada uno de nosotros. No es fácil aceptar la silla incómoda, la casa sin pintar o con el pasillo diferente a lo que nos gusta. Cuando somos susceptibles nos dejamos llevar por esta sensación de arrogancia y todo lo vemos de forma distorsionada. Cualquier cosa nos ofende por no estar de acuerdo con nuestra óptica, tenemos la impresión de que todo el mundo nos trata mal, se burlan de nosotros al hablar o son desconsiderados al mirarnos. Con mucha facilidad acusamos a nuestros familiares o compañeros de trabajo de tener malas intenciones en sus corazones. No aceptamos la imperfección ajena. Tampoco la comida que Dios nos da porque no tiene la sazón nuestra. Esto sucede porque nos sentimos superiores y todo gira en torno a nuestro importante «yo», por tal motivo