Sin exigencia no hay excelencia educativa.
Hoy asistimos a una crisis de autoridad que origina en la institución educativa la insuficiencia en los aprendizajes de los estudiantes en comprensión lectora, ciencias, matemáticas y competencias ciudadanas. Es una realidad compleja y contradictoria que afecta la vida escolar y social. Sin autoridad la exigencia académica es solo una pretensión inocua y el fracaso educativo la consecuencia lógica de un proceso que requiere vivencia de valores fundamentales como el respeto, la disciplina y la autonomía. La vivencia de los valores crea la atmó sfera que necesita respirar el estudiante para que pueda asimilar el conocimiento. Un aire contaminado por los malos ejemplos de los adultos afecta el aprendizaje de los alumnos. Es una enfermedad grave que afecta la comunidad escolar y se refleja en la proliferación del lenguaje soez, la inapetencia lectora, la superficialidad del conocimiento, el uso inadecuado de la tecnología, los conflictos que rompen la armonía de la convivenc...