Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2013

«SE NECESITA UN EMPLEADO»

Imagen
«SE NECESITA UN EMPLEADO» Que tome el trabajo como un placer y no un castigo. Que ante los obstáculos y dificultades salte feliz y demuestre su entereza y afán de superarse. Que confíe en sí mismo antes que en su buena suerte. Que sonría y que sin egoísmo ni envidia en su saludo exprese su disposición de hacer más llevadera la carga de sus compañeros. Que tome su tarea con el interés y responsabilidad de quien guarda un tesoro y sea cuidadoso con los bienes y solidario con las personas de esta empresa. Que sepa hablar y escuchar en el momento justo y tenga el deseo de aprender de los demás, de las adversidades y sobre los temas que aumenten su eficacia en el trabajo. Que llegue a tiempo para iniciar su labor y a la hora de salida examine atentamente si dio algo de sí mismo que no estipulaba el contrato ni demandará como salario. Si Usted reúne estas condiciones reciba nuestra admiración y felicitación porque el éxito lo espera y  anticipadamente le

Entre la inconformidad y la indolencia.

Imagen
Es bueno ser inconformes, pero no es lo más conveniente hacer de la inconformidad una costumbre. Hay quienes no se hallan a gusto con su estatura o con el color de sus ojos. Es difícil que alguien admita que está de acuerdo con su sueldo. En la casa nos molesta la distribución de las cosas y muchas veces deseamos tener un montón de cachivaches que llenen la sala. Para algunos son mayores los traumas y egoísmos que las ganas de vencer y escalar la cima sin desconocer a los demás. No faltan aquellos a quienes les irrita el comportamiento de su pareja o de sus hijos porque no aceptan los consejos que de ellos reciben. En fin, parece que nos sentimos incómodos hasta con nuestro rostro porque no expresa alegría. Sin embargo, existe una multitud que afirma que sin esa inconformidad no se puede esperar el progreso social y el crecimiento personal. Otra afirma que si abandonamos la inconformidad admitiremos la indolencia que es peor enfermedad. Y seguramente conoceremos a personas que dicen

Apoyémonos.

Imagen
Una de las formas del amor humano es la solidaridad.  La solidaridad como valor, casi siempre nos hace pensar  en esa actitud que asumimos en emergencias y desastres, sin embargo, es una característica de la sociabilidad que inclina al hombre a sentirse unido a sus semejantes y a cooperar  con ellos. No es de extrañarse que escuchemos este término con mayor frecuencia cuando nos encontramos en épocas de guerra o de grandes desastres naturales.   Podemos definirla como la colaboración mutua en la personas, como aquel sentimiento que mantiene a las personas unidas en todo momento, sobre todo cuando se viven experiencias difíciles de las cuales no resulta fácil salir.   Manifestamos esta unión y cooperación, cada vez que procuramos el bienestar de los demás, participando en iniciativas como puede ser la visita a los enfermos en un hospital, haciendo colectas de ropa y alimentos para los más necesitados, en un grupo que imparta educación en comunidades marginadas, colaborando en

Relaciones entre lo público y lo privado

Imagen
Lo público e s el espacio de todos... y el espacio de nadie. Algunos, faltos de cultura ciudadana, lo llenan de basura y muy pocos son los que protestan por el desaseo. La calle, el parque son lugares que debieran interesarnos, pero no hay compromiso de los ciudadanos por hacer de esos espacios los paisajes agradables de la vida citadina donde niños y adultos tengan un lugar de esparcimiento. No faltan quienes hacen de la calle y el parque el baño público de sus mascotas. Esas personas, con sus actitudes, demuestran la falta de cultura ciudadana.  Estos sitios son el dominio preferencial del Estado, pero también reproducen experiencias de resistencia. Se constituyen como el lugar de encuentro, donde los discursos dan paso a la acción y aquella a la reinvención de las nuevas y viejas prácticas sociales. Requiere capacidad de propuesta y diálogo, impone encuentro y tolerancia. Sin la aceptación de las diferencias la plaza, la calle, el parque se convierten en lugares peligrosos

Todos tenemos problemas

Imagen
La vida de los grandes hombres enseña que todos tenemos problemas porque ellos también los tuvieron y hasta fueron mayores que los nuestros. Si desea comprobarlo revise las biografías de Sócrates, Simón Bolívar, Franklin Delano Roovelt, Hellen Keller, Winston Churchill, Albert Einstein, Tomás Alba Edison, Albert Schweitzer, Ludwig Van Beethoven, Mahatma Gandhi, Marco Fidel Suárez y se dará cuenta que tenían limitaciones como ceguera, sordera, parálisis, sus hogares se habían roto, padecían pobreza extrema, o tuvieron que soportar situaciones tensas y perturbadoras.  Uno se puede preguntar y es bueno hacerlo. ¿Por qué ellos superaron sus problemas y triunfaron? Y es mejor la analizar la pregunta: ¿Cómo lo hicieron? Pero seguramente llegaremos a la conclusión de que cada problema exige una solución particular.   Por eso me concentraré en responder   la primera pregunta donde sólo hay una respuesta: Porque no buscaron excusas que los precipitaran en el fracaso. Aceptaron sus

APRENDIZAJE

Imagen
A eso de caer y volver a levantarte, de fracasar y volver a comenzar, de seguir un camino y tener que torcerlo, de encontrar el dolor y tener que afrontarlo, a eso, no le llames adversidad, llámale SABIDURÍA . A eso de sentir la mano de Dios y saberte impotente, de fijarte una meta y tener que seguir otra, de huir de una prueba y tener que encararla, de planear un vuelo y tener que recortarlo, de aspirar a ser águila y no ser más que gorrión, de querer alcanzar la cima y no saber ni el camino, de avanzar hacia la montaña y no llegar ni a la orilla, a eso, no le llames castigo, llámale ENSEÑANZA . A eso, de estar en compañía de quien amas,  de tener días felices y días tristes, días de fracasos y días de triunfos, a eso, no le confundas con la monotonía, llámale EXPERIENCIA. A eso, de buscar el porqué  tus ojos miran las cosas y tus oídos oyen las voces del universo , y tu pensamiento viaja a los confin

Emular, antes que imitar.

Imagen
Si bien los seres humanos casi todo lo aprendemos por imitación no resulta fácil imitar sin humillarnos y sentirnos irrespetados. Nos enfadamos cuando alguien no sigue nuestras sugerencias o no se deja imponer nuestras convicciones. Solemos comparar a nuestros seres cercanos y amados con otros, que nos parecen ejemplos a seguir y por eso queremos que ellos los sigan de manera ciega. Hay personas que viven y actúan de manera determinada porque esa es la forma como les corresponde a los de su clase o profesión. A éstas les causa repulsión ver que otra persona actúa como ellos sin ser de ese estrato. Les parece una vergüenza que alguien de otro color viva su vida de manera diferente a como ellos la viven. La clase social, los abolengos, la raza, los títulos académicos desarrollan ciertos grados de rigidez y etiquetas que producen vacío y desasosiego en muchos de nosotros porque creemos, erróneamente, que los demás deben ser como nosotros o nosotros como ellos. Vivimos en continua co

Relación e integración.

Imagen
Cuando experimentamos la comunicación interior de cuerpo, mente y espíritu con el sentido de totalidad o integridad humana surgen como consecuencia natural la paz interior y el gozo de vivir. Esa integración se expresa, además, en las relaciones que establecemos con las cosas, las personas y con Dios. Para comprender mejor el tema de las relaciones conviene aclarar que en el lenguaje diario utilizamos conceptos que solemos emplear como sinónimos sin reflexionar sobre sus diferencias. Con el fin de evitar esa confusión debemos indagar el significado de asociación, relación e integración en el diccionario de la RAE. El primer término se deriva de asociar: “ Unir una persona a otra que colabore en el desempeño de algún cargo, comisión o trabajo. || Juntar una cosa con otra para concurrir a un mismo fin. ” El segundo de relacionar: “Hacer relación de un hecho. || Establecer relación entre personas, cosas, ideas o hechos. || Mantener trato social.” El tercero de integrar:

Del libro Reflexiones para un Buen día

Imagen
Prólogo Nadie puede negar que la memoria de la humanidad es la escritura. Insensato resulta afirmar que un pue­blo sin buenos lectores es un pueblo de progreso. El escritor pierde su tiempo y su vida cuando no halla lec­tores acuciosos y cr íticos que continúen su obra. Es como el bronce que suena en una aldea de sordos, pero más pierden los sordos que quien hace sonar la cam­pana para alertarlos de los gravísimos problemas de la ignorancia. De palabras se forman los libros como de notas se constituyen las partituras. Pero unos y otras requieren del fiel intérprete que les dé nueva vida. Nada gana el pájaro con tener alas si no hace el esfuer­zo de volar. De nada le sirve a una ciudad una bibliote­ca si no hay lectores. Así como la memoria nos impide que repitamos el error, los libros nos advierten que no es posible asegurar un futuro promisorio sin conocer el pasado, porque como bien dijo alguien: "Quien no co­noce su pasado, está condenado a repetirlo." El hom­bre en

Este día es un tesoro.

Imagen
Escribió la chilena Gabriela Mistral: “Tengo un día. Si lo sé aprovechar, tengo un tesoro.” Este aforismo indica que vivir el presente no es sólo un asunto que debe preocupar sino que debe ser planeado de la manera más eficaz para conseguir todos sus beneficios. De nada sirve despertar temprano y prestar atención a lo que hacemos y pensamos si no hay claridad mental y moral en la meta que nos propone el día. Una atención centrada en ideas mezquinas como trabajar para acumular o derrochar es más patológica que útil. En ambos casos los contenidos de la mente reflejan estados de ánimo enfermizos y ninguno de ellos señala la afectividad que distingue al ser humano del oso hormiguero que se come a sus crías. En muchos de nosotros, aún persiste el instinto caníbal y solemos morder a muchos distraídos que no observan y no saben leer las intenciones ajenas. No falta la persona que se siente importunada porque su pareja o su hijo le hablan y responden de manera ilógica porque no le oyen

Mitos que pueden ser reales.

Imagen
21 de mayo de 2013 Muchos son los escepticismos en que caemos los seres humanos en el camino de la ignorancia a la certeza. Pero hay algunos que arrojan tantas dudas que bien se puede terminar creyendo en los fenómenos que nos parecen simples mitos de la gente del común. Para señalar uno de tantos, hagamos algunas consideraciones sobre el fenómeno ufo o casos de avistamientos de los ovnis. Según la historia nuestra, los hechos se pueden rastrear a partir de 1947, pero investigaciones atentas en diarios de años anteriores indican que esta fecha es una equivocación más de la falible naturaleza humana. The Evening World – Daily Magazine, de los Estados Unidos, en la edición del martes 12 de marzo de 1918 afirma que “Decenas de residentes de Windsor, Oat, han dicho a la prensa que han visto a un ángel rodeado de ardiente vapor suspendido en el aire por encima de la ciudad el pasado sábado por la noche. En Detroit, en la misma noche, el ángel fue visto, medit