Oración del día

 

29 de noviembre de 2022

Padre Celestial:

Gracias por este bello amanecer que me invita a glorificarte y a reconocerte como la única luz de mi camino.

Hoy tengo necesidad de admitir que soy un ser humano que comete muchos errores.

Enséñame a ser humilde. Sé que es difícil en medio de la arrogancia que da este mundo, pero quiero ser manso y humilde como tu Hijo, Jesús.

Señor, es mi deseo pedirte que bendigas a todas aquellas personas a quienes he causado mal. Tal vez sin darme cuenta las herí y sin darme cuenta se alejaron de mi vida y por mi mal ejemplo, también, de ti.

"En ti me apoyé desde mis primeros pasos, tú me atrajiste desde el seno de mi madre, y para ti va siempre mi alabanza. Pero ahora para muchos soy un escándalo, y sólo me quedas tú, mi amparo seguro. Llena de tu alabanza está mi boca, de tu esplendor, el día entero." (Salmos, 71: 6-8)

Señor, Tú eres el dueño de mi vida y Tú me das salud y vigor. Concédeme un día sereno para meditar tu amor. Te suplico devuelvas la salud a quienes se hallan en los hospitales sufriendo a causa de sus heridas y enfermedades.

Señor, Tú eres el dueño del tiempo y de todos los días porque tú eres eterno. Concédeme la paz de tu Santo Espíritu y no permitas que en este día me olvide que tuyas son mis manos y que debo utilizarlas para construir tu Reino y bendecir a mis hermanos.

Señor, bendice a quien con sincero corazón te ofrece esta oración de alabanza y gratitud. Te lo pido en el nombre de tu Hijo, Jesús, que contigo y el Espíritu Santo, son el único Dios en quien confío. Amén.