Oración del día

 


9 de agosto de 2023

Padre celestial:

Te alabo y admiro tus maravillas. Un estudiante, recuerdo en este amanecer, me interpeló en clase: “Tú que eres filósofo y escritor sabes muy bien que pruebas científicas de la existencia de Dios no existen”. Como no era la primera vez que me hacían este comentario, respondí con espontaneidad: “Tienes razón. La ciencia busca causas en los fenómenos que podemos palpar con los sentidos, pero a Dios sólo se le halla a través de la fe”. El método científico, trabajo arduo y de mucha observación, permite llegar a descubrimientos sorprendentes. Pero la inteligencia del Creador del universo no se agota con dos o tres teorías. Hay muchos fenómenos por explicar y en la dimensión moral y espiritual sólo tu fe puede conducir a la comprensión. Sin fe sólo se hayan dudas y oscuridad. Dios es Luz, pero sólo brilla en quien lo busca. La verificación, muchas veces, confirma que la ciencia también puede formular hipótesis equivocadas, como cuando afirmaban los hombres de ciencia el geocentrismo y hasta repudiaban al que se atrevía a discrepar de sus paradigmas. A Dios hay que buscarlo donde menos se espera que se revele: “Como heraldo del Señor vino un viento recio, tan violento que partió las montañas e hizo añicos las rocas; pero el Señor no estaba en el viento. Después del viento hubo un terremoto, pero el Señor tampoco estaba en el terremoto. Tras el terremoto vino un fuego, pero el Señor tampoco estaba en el fuego. Y después del fuego vino un suave murmullo. Cuando Elías lo oyó, se cubrió el rostro con el manto y, saliendo, se puso a la entrada de la cueva. Entonces oyó una voz que le dijo: —¿Qué haces aquí, Elías? Él respondió: —Me consume mi amor por ti, Señor Dios Todopoderoso. (1 Reyes 19:9-18)

Perdona, Padre bueno, nuestra falta de fe. Perdona que te busquemos en lo espectacular. Perdona que creamos más a la ciencia que a tu Hijo, Jesucristo. Danos hoy sabiduría y envía sobre nuestros hogares tu Espíritu Santo para que oyendo la Voz que viene de lo alto hagamos tu santa voluntad y que nosotros comprendamos las palabras del apóstol: “Nadie puede agradar a Dios si no tiene fe. Cualquiera que se acerque a Dios debe creer que Dios existe y que premia a los que lo buscan”. (Hebreos 11:6). Por favor, Dios nuestro, escucha nuestras plegarias y danos tu misericordia. Amén.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Oración del día

Oración del día

Oración del día