Oración del día
30 de noviembre de 2024
Señor Jesús:
Señor
Jesús, en este instante del amanecer en que la naturaleza te aclama, deseo
alabarte con todo mi ser. Pero para disponerme y ser digno de ti, te pido
perdón porque muchas veces, de manera irresponsable, opto por mi comodidad, por
el menor esfuerzo. Tal vez sin desearlo o, a veces sabiéndolo, desperdicio el
tiempo, ese exótico tesoro que a cada momento pones en mis manos. Mientras los
otros se esfuerzan yo dejo que el reloj camine sin preocuparme. Enséñame, en
este día, a sacar provecho de las horas para servir con alegría a mis hermanos,
para construir tu reino de amor, para alabarte en cada una de mis acciones.
Enséñame a ser responsable de la misión que me encomendaste. Que no diga:
“Señor, aquí tienes tu pieza de oro, la guardé en un pedazo de tela.”
Perdóname, por olvidar tu orden expresa: “Hacedlo fructificar hasta que yo
vuelva.” (Mateo 25:14-30) Perdóname, por ser un siervo inútil. Que hoy dedique
todo mi tiempo a trabajar para honra y gloria de tu nombre. Que el Padre
celestial dé su aprobación a cuanto realice. Que el Santo Espíritu de amor me
dé sabiduría para comprender tu voluntad. Que, sin egoísmos, como las flores de
jardín, me entregue a los demás y tenga la humildad, si alguien me ofende, de
perdonar su actitud hostil.
Señor,
inicio este día con la confianza plena de tu presencia en mi vida. Haz de mi
existencia un himno de gratitud por todo lo que me das. No sólo a mí sino a mi
familia y a mis hermanos. Amén.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por su comentario