La rutina conduce al tedio 20 de enero de 2013
Mucha gente es fácil presa del tedio porque nunca busca hacer algo diferente a lo que diariamente, por razones de trabajo o costumbres familiares, realiza. Estas personas no ven diversión en la novedad o interés en el aprendizaje. Dedicar tiempo para leer, aprender a pintar, conocer nuevas culturas, indagar sobre dudas y misterios que asombran, ir a clases de guitarra, incluso aprender a trenzar el cabello para peinarse o peinar a sus hijas, hace que la vida cobre sentido. Otras veces, se olvidan de aquellas actividades que solía realizar y que le daban alegría como salir a caminar en compañía de sus hijos, trotar al lado de la esposa, ir al gimnasio o la piscina, visitar museos, podar árboles y hacer manojos de flores. Al ser humano, y especialmente al niño le encantan los viajes, no solo por los caminos y poblados, sino ese que llamamos viaje al descubrimiento. Comenzar por descubrir que le gusta y enfocar la mirada hacia ese objetivo produce una satisfacción que ayuda a enf...