Oración del día
14
de marzo de 2025
Señor:
Invocamos tu nombre y pedimos tu misericordia. Por favor, escucha nuestra oración. Tomemos el salmo 85 y leamos:
En este
nuevo día preguntemos a Dios: “¿Vas a estar enojado con nosotros para
siempre?”
El
salmista reconoce el pecado cometido y pide restauración. “Restáuranos una
vez más, Dios y salvador nuestro; pon fin a tu disgusto con nosotros”. Ten
compasión de nosotros que somos pecadores. Libéranos de nuestros vicios y
egoísmos. “¿No volverás a darnos nueva vida, para que tu pueblo se alegre en
ti?”
El
salmista solicita, como nosotros, la venida de Cristo, el verdadero amor de
Dios manifestado en la tierra y que puede restaurar este mundo que vive en
angustia y temor. “Muéstranos, Señor, tu amor inagotable, y concédenos tu
salvación”
Entonces,
la respuesta a la pregunta inicial del salmo 85 es un rotundo ¡NO!
El Señor
no se enojará con nosotros para siempre. Nos ha mostrado su amor y nos ha
concedido la salvación, cumpliendo la petición del salmista, al enviar a su
Hijo Jesucristo a morir por nosotros en la cruz. Hoy sabemos que Dios no
está enojado con nosotros. Él sólo espera que recibamos en nuestro
corazón, la salvación que nos dio a través del sacrificio de Cristo en la cruz.
Hoy
digamos con fe y esperanza: Señor, sé que no estás enojado conmigo, que
escucharás mis plegarias y que tus manos están abiertas para bendecirme. Amén.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por su comentario