Romeo y Julieta




En 1968, Romeo y Julieta aparece en las grandes pantallas gracias a la excelente adaptación de Franco Zeffirelli. Pero profundizando un poco en su lectura esta tragedia italianizada sigue la planeación de los primeros dramas de Shakespeare: Los dos hidalgos de Verona, Trabajos de amor perdidos. Pero Romeo y Julieta es la obra más rica en metáforas que producen el patetismo y angustia en el espectador o lector. Podría decirse que es una anticipación del amanecer barroco.

Sin embargo, esta obra muestra el comienzo de la edad madura del autor. Un apoteósico amor termina en fúnebre pompa y se constituye en la creación más difundida y popular de su teatro. En su lectura hallará John Keats la inspiración para su famosa Víspera de Santa Inés y en la escena del Panteón, Edgar Allan Poe verá elementos que pueden ser incorporados a sus Narraciones extraordinarias.

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