Oración del día


 

4 de diciembre de 2023

Padre celestial:

Gracias por este amanecer que me otorgas. Te pido que me guíes y bendigas cuanto haga. Recuerdo que el sacerdote Elí estaba en tu templo dispuesto a servirte. Allí se hallaba, también, una mujer que oraba en voz baja. El sacerdote percibía que ella movía los labios, pero no escuchaba sus palabras. Ella sufría porque no tenía hijos y algunos se burlaban de ella por no poderlos concebir. Ana, profundamente herida y triste, estaba en la casa de Dios suplicando un milagro. Estaba convencida de que Dios escucharía su plegaria. Un año después la mujer concibió a Samuel, el gran profeta. (1 Samuel 1). Esta historia me dice que puedo contarte mis problemas y tú los escucharás, y si es tu voluntad, me responderás.

“Oh, Dios, oye mi oración. escucha las palabras de mi boca. Hoy te quiero agradecer todas tus bendiciones. Si es tu voluntad, realiza el milagro que tanto te he pedido. “Ahora bien, los apóstoles dijeron al Señor: “Danos más fe”. Entonces el Señor dijo: “Si ustedes tuvieran fe del tamaño de un grano de mostaza, dirían a este moral: ‘¡Sé desarraigado y plantado en el mar!’, y les obedecería”. (Lucas 17: 5-6) Como Ana mis problemas quedan entre Tú y yo. Creo en tu palabra: “Clama a mí y yo te responderé”. (Jeremías 33:3) Aparta de mí las preocupaciones de este día, los desengaños que producen incertidumbre, aleja de mí la enfermedad para que gozando de salud te pueda alabar y bendecir. Que hoy, como el salmista, los demás digan: “Este pobre clamó, y le oyó el Señor, y lo libró de todas sus angustias”. (Salmo 34:6) Te lo suplico en el nombre de tu amado Hijo, Jesús. Amén

Comentarios

Entradas populares de este blog

Oración del día

Oración del día

Oración del día