Oración del día

 

30 de agosto 2022

Señor:

Concédenos sabiduría para discernir y practicar la justicia. Sólo si vivimos la justicia y el amor podemos agradar a Dios. Tengamos presente en este nuevo amanecer estas palabras: “Vida y misericordia me concediste, y tu cuidado guardó mi espíritu”. (Job 10:12)   Si somos justos y sensibles a las necesidades ajenas podemos hacer nuestra la promesa del salmista: “Las sendas del Señor son misericordia y lealtad para los que guardan su alianza y sus mandatos” (Sal 24,10). Dios, perdona nuestros pecados y nos ofrece la vida eterna, por su amor y no por nuestros méritos. Dios es fiel a sus promesas. Dejemos la soberbia y recordemos: “¿Qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece”. (Santiago 4:14)

Reconozcamos en este día a Jesucristo, el Hijo en quien Dios nos hizo partícipes de su amor y su verdad. Sigamos su ejemplo y obremos conforme a la justicia y el amor. Al final sólo se tendrán en cuenta las obras de amor, de misericordia que hayamos realizado Hoy tenemos esta gran oportunidad de demostrar que somos hijos de Dios si servimos sin interés a las personas que necesitan, a quienes sufren porque no hallan trabajo, a los niños que suplican un poco de afecto, a los enemigos que también necesitan la misericordia de Dios y podemos orar por ellos.

Señor, danos sabiduría para hacer tu santa voluntad. Que desde hoy seamos justos y misericordiosos para agradarte. Te lo pedimos en nombre tu Hijo amado, Jesús.  Amén.