Oración del día

 7 de mayo de 2022

Señor Jesús:

Las luces del amanecer se deslizan lentamente sobre las crestas de las montañas. El mundo regresa a su bullicio. El cuerpo, parece desbordante de energía y las tareas nos preocupan. Como en los tiempos tuyos las preocupaciones son impuestos, violencia generalizada y el afán de muchos por conseguir un pan. El pueblo no sabe si es lícito o no pagar tributos para sostener una aristocracia cada vez más sedienta de privilegios y una burguesía cada día más extensa e indolente. No se ven las retribuciones del gobierno en obras que mejoren el nivel de vida y sí se palpan los desmanes de la clase corrupta.

Todos se han desviado, a una se han corrompido; no hay quien haga el bien, no hay ni siquiera uno. (Salmo 53: 3)

En la cima del poder los políticos, como Tiberio, el emperador, no piensan que algún día morirán. Por ahora, se creen dioses. Por eso, Señor Jesús, elevamos nuestra plegaria por los gobernantes para que reflexionen y sean conscientes de su misión de administradores honestos. Tú, que puedes transformar el alma humana, humanízalos y hazles comprender que su deber es servir sin discriminar a ningún ciudadano y sin desfalcar el erario. Que sean conscientes de la necesidad de ayudar a muchos sectores de la sociedad que no encuentran un trabajo digno ni tienen los recursos para sufragar los gastos básicos como alimentación, salud, educación, movilidad y vestuario. Que entiendan que ellos son, como nosotros, peregrinos que vamos hacia el reino de tu Padre, donde hay muchas moradas, y esperamos vivir contemplando los jardines de la vida eterna. Que tu Santo Espíritu los guíe e ilumine con sus dones para que sean administradores dignos como tú lo quieres. Que hoy digamos todos, como el salmista, que alegría cuando me dijeron vamos a la Casa del Señor. Amén.