Oración del día

 

2 de enero de 2022

 Señor y Dios nuestro:

En Secretos de los triunfadores escribí hace muchos años que la ingratitud es el gesto de la pequeñez espiritual. Hoy, en este nuevo día del primer mes reitero aquellas palabras.

Ustedes serán enriquecidos en todo sentido para que en toda ocasión puedan ser generosos, y para que por medio de nosotros la generosidad de ustedes resulte en acciones de gracias a Dios. (2 Corintios 9:11)

Por eso hoy deseo repetir g𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮𝘀 por la existencia y por el sol de cada día. Gracias por enseñarme y fortalecer mi fe en Ti. 𝗚𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮𝘀 por todas tus bendiciones y cuanto me has dado para bienestar de los que amo y me aman. Gracias por demostrarme que no todas las cosas se pueden comprar con dinero y que mi esperanza no puede fundamentarse en las posesiones materiales. 𝗚𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮𝘀 por cuidar de mí en estos tiempos de pandemia y angustia y hacerme reflexionar sobre lo vulnerables que somos los seres humanos. 𝗚𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮𝘀 por darme lecciones a través del dolor y el fracaso. Gracias por ayudarme a vencer el temor que me paraliza y no me deja mirar hacia lo alto de donde vienen todas las maravillas. Gracias por este nuevo amanecer y por este mes que me permite revisar, planear y agradecer. Sólo te pido que no me dejes caer en la ingratitud que nos hace menos humanos. Amén.